El derecho comunitario, también conocido como derecho de la Unión Europea, es el conjunto de normas y reglamentos que rigen a los países miembros de la Unión Europea (UE).

Este ámbito jurídico prevalece sobre el derecho nacional de los diferentes países miembros, ya que el derecho comunitario es superior al derecho nacional. Asimismo, se deriva del derecho internacional público que rige a los Estados de todo el mundo, a los individuos, a las organizaciones internacionales u organizaciones no gubernamentales (ONGs) y a las empresas internacionales, aunque se distingue de dicho derecho por tener sus propios reglamentos y normas jurídicas.

¿Quieres saber más sobre esta disciplina jurídica? Desde Abogados Ledesma, en este artículo te contamos todo lo que debes saber sobre el derecho comunitario.

El derecho comunitario en la Unión Europea

Por definición, el derecho comunitario hace referencia a todas las normas que se aplican en la Unión Europea y que obligan tanto a los Estados miembros y sus individuos como a los órganos comunitarios.

El derecho comunitario de la UE se basa en los Tratados (derecho primario) y en las normas derivadas de los mismos a través de directivas, reglamentos y jurisprudencia (derecho secundario). Para que los Tratados sean ejecutables, deben ser aprobados democráticamente por los distintos Estados miembros. Con la ayuda del derecho vigente, garantizan la aplicación de las políticas de la Unión Europea y la consecución de los objetivos planteados.

Situado en Luxemburgo, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) vela por la correcta aplicación del derecho comunitario.

A continuación, veamos cuáles son los tipos de derecho comunitario en función de las fuentes de dicho derecho.

Fuentes del derecho comunitario

Derecho primario u originario

El derecho primario recoge los distintos tratados firmados por los Estados miembros de la UE. Todos los procesos de toma de decisiones, las normas de funcionamiento de las instituciones europeas, los objetivos de la Unión y las relaciones entre los Estados miembros y la UE se recogen en estos acuerdos.

Pueden considerarse derecho primario los tratados fundacionales de la Unión Europea, como el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, el Tratado de Roma, el Acta Única Europea y la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, así como los sucesivos tratados de adhesión de los diversos países.

Derecho secundario o derivado

Como su nombre indica, el derecho derivado es el conjunto de leyes que surgen como resultado de los objetivos y principios de los tratados. Incluye decisiones, reglamentos, dictámenes, recomendaciones y directivas.

Todas las fuentes mencionadas son de obligado cumplimiento, a excepción de los dictámenes y las recomendaciones.

Convenio Europeo de Derechos Humanos

Todos los tratados vinculados al Consejo de Europa también forman parte del derecho comunitario. Entre estos tratados, el Convenio Europeo de Derechos Humanos es un principio esencial del derecho europeo.

El Convenio Europeo de Derechos Humanos fue adoptado en 1950 y entró en vigor en 1953, con el objetivo de proteger los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos de los Estados miembros. España firmó dicho convenio en el año 1977, tras el fin de la dictadura franquista y en los inicios de la transición. Es tarea del Tribunal Europeo de Derechos Humanos hacer cumplir este acuerdo.

Dicho convenio contiene 59 artículos divididos en varias secciones. El artículo 1, que es el preámbulo, establece que los Estados miembros reconocerán los derechos y libertades definidos en el convenio de toda persona que esté bajo su jurisdicción.

Posteriormente, en el Título I, se recogen los derechos y libertades reconocidos, como son el derecho a la vida (art. 2), la prohibición de la tortura (art. 3), el derecho a la libertad y a la seguridad (art. 5), la libertad de pensamiento, conciencia y religión (art.9) o la prohibición de discriminación (art. 14), entre otros.

Además, también contiene varios protocolos que lo modifican y que incluyen nuevos artículos a respetar. Algunos ejemplos son:

  • Protocolo nº 12, para la prohibición general de la discriminación.
  • Protocolo nº 13, relativo a la abolición de la pena de muerte en cualquier circunstancia.

Relación entre la legislación europea y nacional

Como el derecho internacional es superior al derecho nacional, el derecho comunitario prevalece sobre cualquier disposición del derecho nacional que lo contradiga. De hecho, la Declaración nº 17 del anexo del Acta Final del Tratado de Lisboa y vinculada a la primacía establece que el derecho y los tratados aprobados por la Unión Europea tienen prioridad sobre el derecho de los Estados miembros.

El ordenamiento jurídico de la Unión Europea es independiente. Con la ayuda de sus métodos, resuelve las aplicaciones del derecho europeo. Además, una vez que interviene la competencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, termina la del juez nacional.

En resumen, a través de sus numerosas normas, el derecho comunitario protege y obliga a los Estados miembros de la Unión Europea, así como a todos los ciudadanos nacionales de los mismos.

Si tienes dudas acerca del derecho comunitario en la Unión Europea, contacta con Abogados Ledesma, estaremos encantados de ayudarte.